martes, 13 de marzo de 2012

conmigo a solas...


Oculto detrás de los sueños y la esperanza, esta la realidad más triste y desoladora


Sabes lo que es amar a una persona con tu vida y que tu alma siga atada a esa persona a pesar de todo el tiempo transcurrido? ... sabes lo que es tener una rabia tal a esa persona que si no la vieras nunca más quizás serias más feliz? ... no sabes cómo es el sabor de una rosa en tu boca? si supieras lo hermoso y perfecto que es jamás querrías perderla, pero como todo en algún momento se muere o se pudre... es el momento en que todo pierde su relevancia y buscas otra más hermosa, la cual nunca llega, solo rosas negras cargadas de mentiras e inseguridades que se apoderan de cada rincón de tus sueños hasta aplastarlo todo y quedar vacio.
Sabrás algún día apreciar a alguien que existe de verdad?... todos están ahí, viviendo, riendo, llorando. Pero cuantos existen de verdad? cuantos piensan de verdad cada cosa, cada detalle de sus vidas hasta llevarlos a lo más profundo de su ser. Valorar cada gesto aunque parezca difícil, intentar ser tu mismo de tus sueños, ese que está escondido en tu subconsciente, ese que solo logras ver después de horas de encierro pensando una y otra vez lo mismo, cuando te pierdes en el laberinto de tu imaginación y te ahogas en el mar de los recuerdos tortuosos, esos que te hacen recapacitar y te enseñan a vivir una vez más. cuantas veces he estado en esos zapatos, esos que ya no me quedan bien, jamás había pensado en esto, jamás había vivido de esta forma, la parálisis que tiene inmóvil a mi corazón hace que me convierta en un ser totalmente miserable y feliz. Nunca había sentido tantas ganas de dañar, es que ya no me importa nadie? ni siquiera yo mismo o mi otro yo, hasta ahora me encontrare quemando alas de ángeles, solo quemando todo a mi alrededor hasta hacerlas cenizas, sean mías o de alguien más, esto saco lo peor de mi y dejo un abismo fantasmal en el que podrá caer mucha gente, hasta que caiga yo y todo quede a oscuras.

en mi jardín de rosas rojas me sentaré, con mis manos las acariciaré y mientras tanto el cielo observaré y sé que te encontrare, hasta entonces para ti yo viviré.